Una palabra en inglés que no tiene un análogo fácil en español es “bullshit”. Quizás los términos sandeces o estupideces se acercan, y en España es popular el término gilipolleces, pero ninguno logra capturar el significado completo de la palabra en inglés. Todos sabemos de qué se trata, y reconocemos cuando alguien hace o dice cosas que son, simplemente, “bullshit”. Pero pocos han hecho un análisis a fondo del tema.

En su ensayo On Bullshit, el profesor de filosofía Harry G. Frankfurt explica qué es y qué no es “bullshit”. Escribe:

Una de las características más prominentes de nuestra cultura es que hay tanto “bullshit”. Todos saben esto. Cada uno de nosotros contribuye su parte. Pero tendemos a dar esta situación por sentado. La mayoría de la gente se siente confiada en su habilidad de reconocer “bullshit” para evitar ser tomado. De manera que el fenómeno no ha levantado mucho pensamiento ni investigación. Como consecuencia, no tenemos un entendimiento claro de lo que es “bullshit”, por qué hay tanta, y qué función sirve. Y nos falta una apreciación concientemente desarrollada de lo que significa para nosotros. En otras palabras, no tenemos teoría. Yo propongo comenzar el desarrollo de un entendimiento teórico del “bullshit”, principalmente proveyendo un análisis filosófico tentativo y exploratorio.

Acto seguido Frankfurt hace una disertación profunda, detallada y completamente fascinante del “bullshit”, desde una perspectiva filosófica seria -el ensayo no es una broma- y concluye explicando cómo el “bullshit” es un enemigo de la verdad aún más peligroso que las mentiras mismas. Es un escrito verdaderamente provocador. Sigan el enlace para leerleo:

On Bullshit, de Harry Frankfurt